Tras el terremoto electoral del pasado domingo, tanto en Cataluña como en España, donde el giro a la derecha ha sido apabullante, observo como, entre la gente que ha dado batalla al ahora moribundo gobierno del PSOE, surge una cierta energía o creencia. La creencia de que el próximo gobierno del PP se va a hundir en cuatro días, de que la presión en la calle va a ser atroz, de que no van a aguantar.
Y mi opinión es que no se trata más que de la expresión de un deseo. Nada me gustaría a mi más que ver a este nuevo Gobierno de caraduras tambalearse y dar paso a una situación política más atractiva que el consabido turnismo de esta segunda Restauración: PP, PSOE, PP, PSOE, PP... y así hasta el infinito o hasta que acabemos en un zulo cobrando 400 euros y volviendo al feudalismo.
Para vencer en esta vida no es sólo necesario el desear la victoria. Al alumno que suspende, no le sirve con creer que en el próximo examen le van a poner un 7. Tiene que observar en que ha fallado, como puede mejorar, y entonces, acudir con seguridad para que el deseo se materialice.
Mi escrito no pretende ser una muestra de arrogancia intelectual, ni tampoco una muestra de desprecio hacia nadie. Pretende abrir una reflexión y un debate, pretende, desde el punto de vista de una persona que comparte esa intención de lucha, analizar el escenario de batalla. Ningún ejército va a la guerra sin conocer la situación del terreno o la situación del enemigo.
A continuación explicaré de forma detallada cuales son los puntos, a mi modo de ver, erróneos en esa percepción.
1.- La difícil ubicación de los abstencionistas electorales. Muchas personas consideran que los 9 millones de abstencionistas son gente directamente contraria al nuevo Gobierno conservador y ese cálculo es erróneo a todas luces. Siempre ha habido abstención. También la hubo en 2004, y no hubo una protesta continuada en la calle contra el Gobierno del PSOE, como tampoco la hubo en 1996 contra el Gobierno de Aznar.
Mucha gente de los que se consideran "abstencionistas activos" piensan que todos los que lo hacen se abstienen por las mismas razones que ellos. De la misma forma que existe un dicho español que dice "el que calla, otorga", muchos abstencionistas pueden haber no participado porque daban por sentada la victoria del PP, victoria con la cual parte de esa abstención se puede sentir cómoda. Además del consabido pasotismo de un porcentaje reducido, pero no por ello despreciable, de la población. "Que decida otro. Yo paso. Son todos iguales". En la difusión de ese mensaje de "son todos iguales" ha contribuido notablemente el 15-M.
2.- No se engañen, la gente ha votado RECORTES. Todo el mundo, en mayor o menor medida, sabe que las intenciones del PP eran y son la aplicación de un programa de ajustes duro. Incluso en Cataluña CiU no sólo presentaba esa posibilidad, sino que ya la estaba aplicando en la institución que gobierna. Y el resultado electoral dice que la GENTE APRUEBA LA POLÍTICA DE RECORTES.
Mucha gente en la izquierda y en los movimientos sociales no es capaz de aceptar esto y sin embargo es una realidad. Piensan erróneamente que la gente común se indigna ante la situación de injusticia, ante la canallada que suponen los recortes. Y ese es el principal punto de error. ¿Como puede ser que la gente vea bien esa canallada?
Mi reflexión es la siguiente. La izquierda no se ha preocupado de difundir su mensaje de forma convincente y de forma que calase en el imaginario colectivo y a ello ha contribuido el que la izquierda "percibida" estuviera en el Gobierno (el PSOE). Las ideas dominantes en la sociedad son el consumismo, el individualismo, la comparación con el otro. En esas condiciones, la gente solo busca "salvar su culo", "mirar por lo suyo". No es algo general, pero esta mentalidad está extendida en gran parte de la sociedad. La labor de la izquierda será día a día romper ese pensamiento único dominante y no caer en contradicciones que la derecha mediática y sus mamporreros explotan, a veces no sin razón en casos puntuales, para dejar claro el mensaje de "todos son iguales".
Valores como la solidaridad, la empatía, la unión y la lucha contra la injusticia deben extenderse y poco pueden hacerlo si las preocupaciones básicas de la gente es el "que hay de lo mio" o el "donde vamos a cenar hoy".
3.- La estrategia de la derecha y medios afines: explotar la insolidaridad. Ese será el discurso. Ya lo utilizó el PSOE con mucho éxito con los controladores aéreos y le funcionó. Hasta tal punto que incluso gente declaradamente de izquierdas se sumó a ese lichamiento social de un colectivo.
Dentro de los afectados por los posibles recortes hay gente heterogénea: ahi estará el mantra de la derecha para justificarlos. Dos de los colectivos que van a ser funcionarios e inmigrantes. Hay ya muestras de ello. ¿Como lo se? Pues porque antes de iniciar medidas se tiene que preparar la maquinaria mediática para justificarlo. Es la estrategia de Goebbels. Crear un enemigo y una vez extendida la imagen de enemigo, ir a por el. Y esa estrategia ya ha comenzado en el caso de los funcionarios: Ayer mismo aparecían al mismo tiempo dos noticias: la baja productividad de los funcionarios y los "supuestos" elevados sueldos que ganan.
Dado que nos encontramos ante una sociedad donde el individualismo y el compararse con el otro el mensaje es claro. "Mire, usted que esta en el paro y esos caraduras ganando 2000 euros". Dato que es falso dado que se han calculado con los sueldos de 2010, antes del recorte.
La estrategia no debe ser sólo defender los derechos del sector público. Debe ser primero explicar que lo que tienen los empleados públicos no son privilegios, sino derechos. Que no son culpables de que haya gente en el paro o ganando 1000 euros. Que los culpables son otros. Que la responsabilidad es de banqueros y de esos mismos políticos del PP que tienen las administraciones infladas de chupatintas y enchufados.
Con los inmigrantes pasará lo mismo. A lo que se añade la sensación de "que nos quitan el trabajo".
Para que la gente no se deje llevar por esa campaña de expoliación de la insolidaridad y desviar el foco para que la gente entienda que sus enemigos no son los que están jodidos o menos jodidos que ellos, sino para que vean que los verdaderos culpables de que les jodan son otros: banqueros y la derecha mediática y política, junto a la CEOE, debe antes extenderse un mensaje claro y sin ambajes de solidaridad, unidad, apoyo mutuo que cale en la clase trabajadora y en las clases medias receptivas.
4.- La existencia del 15-M. Muchos dan por sentado que su existencia avivará la protesta ciudadana. Pero si analizamos el resultado, incluso los que hemos participado en el, veremos que su función dista mucho de ser movilizadora. Tal y como está estructurado ahora mismo, se trata de un movimiento que puede llegar a lastrar dicha movilización.
Mucha gente se sorprenderá al leer esto pero daré datos: la excesiva energía gastada junto con la percepción que ha calado de "todos son iguales" sin plantear un modelo alternativo.
El hecho de convertir la protesta en continuada no ayuda a que esta gane fuerza sino a que esta se desinfle. Nadie, salvo la gente que este en el desempleo (y estos tampoco, me atrevería a añadir) puede aguantar una campaña continuada de movilizaciones y acciones. Como decía un slogan de una multinacional de neumáticos, "la potencia sin control no sirve de nada". Durante mucho tiempo estuvo la sociedad como adormecida, con una minoría reducida que protestaba. Al iniciarse el 15-M toda esa energía se disparó, pero convirtiendo la protesta en contínua esa energía se ha ido disipando.
Basta ver la asistencia a asambleas, acciones, etc. ¿Cuánta gente acudía en junio y cuanta gente en noviembre? Y precisamente es ahora cuando esa energía es más necesaria que nunca. Por lo que al final, la estrategia general, buscada o no por sus integrantes, ha sido desmovilizadora.
La labor para convertir esa energía en protesta efectiva es ir por pasos. Concienciación y una vez que se ha conseguido, acción. Hacer lo contrario, como se ha hecho hasta ahora es darle munición al enemigo. Realmente las acciones, salvo unirse a acciones como las protestas contra los recortes o la paralización de desahucios, no sirven sino para desmovilizar y, de paso, para desgastar la posible protesta. Al no haber un interlocutor que una vez protestado sea capaz de arrancar un compromiso a los que mandan y al ir perdiéndose fuerza, la sensación en gente desideologizada es "protestamos para nada". Esa gente no sólo sigue teniendo su estilo de vida individualista sino que además añade un nuevo mantra: PROTESTAR NO SIRVE PARA NADA.
Por otro lado lo que si ha conseguido el 15-M es que cale el mensaje de que todos son iguales. De que este sistema es una farsa. Eso es positivo, siempre que el 15-M plantease un modelo alternativo claro y definido. Dado que no es el caso, el mensaje es a la larga negativo para esa protesta que tenga que venir cuando los recortes del PP arrasen. ¿Por que? Porque ayuda a que la gente vea en la izquierda que siempre se ha movilizado uno más de esos. "Todos son iguales". Esa izquierda (que no es el PSOE) también. Y no olvidemos algo. El PSOE podrá ser igual en cuanto a política económica y sus cúpulas iguales a las del PP, pero ¿y las bases?¿y las políticas en otros ámbitos? ¿Son lo mismo una señora de derechas con abrigo de visón y añoranza de tiempos pasados y una señora de la extrema izquierda que protesta en la calle en cuanto tiene oportunidad? Tiempo vamos a tener para entender que izquierda, sea esta falsa o verdadera, y derecha, jamás han sido lo mismo.
5.- Una sociedad donde la envidia es un sentimiento extendido. Desgraciadamente es algo característico en muchas sociedades y la española también. Pero a diferencia de la envidia positiva (el querer llegar al nivel de otro que se encuentra mejor) existe una envidia inversa, basada en que sea el que se encuentra en una situación "menos mala" el que acabe mal, una envidia destructiva. Y, mal que nos pese reconocerlo, este sentimiento existe cuando existe una crisis y un individualismo tan deshumanizado.
Este sentimiento es el que hay que combatir con más ahinco y es el que la derecha, día tras día, tratará de explotar. Si una persona esta peor no es culpa del que tiene una situación mejor, ni su solución será ver al mismo nivel a quien estaba antes mejor que el. Se trata de lo contrario. De luchar por igualar al alza las condiciones, sobre todo cuando hablamos de clase trabajadora.
Esa envidia inversa va a ser explotada a la hora de "meter mano" en colectivos diversos: funcionarios, parados, empleados de diversos sectores. Aquí se deberá luchar para hacer entender a la gente que determinadas cosas no son privilegios sino DERECHOS. Pero, fundamentalmente, para señalar sin demora el verdadero cáncer del problema. Banca y políticas neoliberales. Si el recurso a apelar a la solidaridad no fuera lo demasiado fuerte, hay que también explicar alto y claro los privilegios (y eso si son PRIVILEGIOS) que tienen ambos colectivos de carroñeros: el rescate a los bancos, las pensiones de los banqueros, los privilegios de los políticos que copan todo, etc.
La gente debe ver que su enemigo no es el parado que cobra una prestación porque se ha quedado sin empleo. Ni el funcionario que tiene un salario superior a él. Ni el empleado del sector del metal en comparación con el de la hostelería. Todos están en el mismo barco y sin apoyo mutuo y solidaridad, todos se van a hundir en la mierda.
El verdadero problema de ambos es que cuando se recorta, se recorta para que los bancos se llenen los bolsillos, bancos que financian al partido del Gobierno (también a otros). Que cuando se quita el bono libro, el Conseller sigue yendo en coche oficial a misa. Que cuando hablan de crisis, en realidad se habla del mismo sistema liberal que muchos defienden. En el que la miseria si se socializa pero la riqueza se la quedan unos cuantos.
6.- Autorresignación y comprensión de los ajustes. Es el mensaje que llevan tiempo, incluso antes de las elecciones, explotando. Que es necesario. Que tenemos que apretarnos el cinturón. Que hay que arrimar el hombro. Y va a ser continuado este mensaje. Y muchas personas que pueden ser los próximos en sufrirlos, llegan a tener la sensación de que no hay otra salida.
Así que, es importante romper este falso mantra. No tenemos el porque ajustarnos. Ni siquiera debemos planteárnoslo. Hay ya 5 millones de parados. Funcionarios con sueldos recortados. Empleados del sector privado con condiciones laborales cada vez más penosas. Jóvenes sin futuro. ¿Donde vamos a apretarnos el cinturón?
El cinturón nos lo tenemos que apretar para que ese dinero acabe en empresas que despiden, en bancos que desahucian a la gente, en bancos donde sus directivos cobran sueldos multimillonarios. Eso nunca es un ajuste, es un robo a mano armada.
El ajuste debería venir de otro sitio:
- De políticos con dos sueldos
- De multitud de asesores sin oposición colocados a dedo pastando del dinero público.
- De cajas de ahorro donde se han cometido ilegalidades flagrantes.
- De empresas grandes que pagan en España menos impuestos que en Francia y sin embargo hay un 20% de paro mientras allí hay un 10%.
- De los tenedores de grandes fortunas
- De los 11.000 millones anuales que la Iglesia se lleva de los presupuestos.
- De un presupuesto militar inflado.
- De perseguir el fraude fiscal y la economía sumergida.
7.- El factor político percibido. La fidelidad de la base del PP y la contraproducencia del PSOE. Esto es un factor a tener en cuenta. Al PP no lo han votado millones de personas más. Solo 500.000. Pero quienes lo han hecho en un 80% es gente que morirá con sus ideas y a las que es tontería convencer. Es gente que ladraba ante los ajustes de Zapatero con razón, pero acepta que le bajen el sueldo un 20% si son los suyos. Es triste o para reirse, pero es así. Son gente que simplemente se cree de clase media. Españolitos de bien. Se puede perder energías en movilizarlos, pero será inútil.
Y por otro lado la contraproducencia del PSOE. El PSOE fue quien empezó los ajustes. Fue el que comenzó la senda de recortes. No tiene ninguna autoridad moral para tratar de unirse a ninguna protesta. Toda protesta en la que el PSOE participe será una protesta donde el PP podrá salir airoso porque en el imaginario colectivo sigue existiendo el recuerdo de la etapa Zapatero. Por ello la labor será difícil. Hacer entender a los socialistas que el problema no son ellos, sino su partido y su ausencia de autoridad moral. Todo intento por incluirles a modo colectivo o dejarles que canalicen cualquier protesta en el próximo tiempo será hacerle un favor a los poderosos. La socialdemocracia ya no es la opción, salvo que se refundiese, y es mejor que quede claro más pronto que tarde.
Este es un breve resumen de la situación en la que nos encontramos y en esta situacion hay que ser realista. Va a ser duro, muy duro poder levantar una amplia protesta ciudadana ante la situación de fin de muchos derechos. Va a ser un trabajo costoso. Va a ser mucho más costoso ante una situación en la que va a existir una fuerte y coordinada campaña mediática y una mayor represión.
Así que, dejémonos de ensoñaciones infantiles y comencemos a trabajar para la situación que comienza. De la inteligencia individual y colectiva dependerá que esta nueva situación sea el fin de este sistema neoliberal sin máscara o que sea su entronación por muchos años.
¡Unidad! ¡Solidaridad! ¡Trabajo!
No podrán con nosotros.
26 nov 2011
17 nov 2011
Bomba social y programa oculto del PP (o del psoe)
Estamos a dos días de las elecciones generales y con una situación auténticamente de comedia. Vemos después de las encuestas y del día a día, que la sensación generalizada que existe es que será el PP el que arrase en las urnas.... bueno, arrase por autoinmolación de un PSOE que ha traicionado a su electorado y que, ahora que llegan las elecciones, se acuerda de su keynesianismo y sus principios.
La prima de riesgo ha tocado máximos esta semana, y se ha situado en 500 puntos, que es el mismo nivel en el cual se iniciaron los rescates de Grecia o Irlanda en el pasado.
España es ahora mismo una enorme bomba de relojería social por varias razones. Muchos de los que participamos en el 15-M no entendemos como puede ser que ante un paro desbocado, ante la situación actual y ante el comienzo de los recortes en las comunidades autónomas no haya pasado nada, salvo que, los mismos que siempre estamos, somos los que permanecemos protestando ante las injusticias.
Ahí es donde entran esos factores que hacen que la situación sea una bomba de relojería a la que no le queda mucho tiempo por estallar:
1.- Durante los tres años de crisis, mucha gente no ha visto mermada su situación. Bien porque conservaban el puesto de trabajo, bien porque existía una prestación por desempleo o bien porque han pasado a la economía sumergida o a estar protegidos bajo el paraguas de la solidaridad familiar. Solidaridad familiar que se está acabando, dado que los datos económicos muestra que el ahorro vuelve a descender sin que suba el consumo. O dicho en otras palabras: se está usando ese ahorro para lo cotidiano.
2.- Pasado "recordado": Mucha gente, y desgraciadamente no es poca, ha interiorizado un dato irreal pero que ha calado entre la gente. La época en la que el PP estuvo en el Gobierno se crearon puestos de trabajo y la economía mejoró de forma notable. Fue algo que sucedió en algunos países de nuestro entorno y en un contexto internacional favorable. Mientras que de igual modo, ese modo de vida que no era más que un espejismo y estaba fomentado en una "burbuja inmobiliaria" estalló con el PSOE. Y algunos también recuerdan la época de Felipe González, con sus vaivenes económicos y una tasa de paro elevada. Para mucha gente, razonando de forma simple, PSOE es sinónimo de recesión como PP es sinónimo de bonanza.
3.- Sensación de fin de etapa. Una inmensa mayoría, desde mayo, dan por finiquitado el periodo socialista y mucha gente no protesta o prefiere no hacerlo a la espera del cambio. Porque entienden que el cambio será positivo. En pocas palabras dan por muerto al Gobierno del PSOE y aguantan estoicamente porque confían -y las encuestas ayudan- en el fin de dicha etapa. La gente suele protestar cuando el "odiado" es fuerte o esta en un punto medio, pero desisten de hacerlo cuando ya dan por liquidado al, según muchos, el origen de sus males. ¿Para que protestar si con mi voto los voy a "botar"?
4.- El punto más peligroso: sensación de mejora con el cambio. Este es el punto más dramático. Muchos ciudadanos/votantes/consumidores, dadas las dos premisas anteriores, creen -necesitan creerlo para agarrarse a la última esperanza- que la entrada del PP significará el pasado recordado... Creen que llegando el PP al Gobierno del país la situación mejorará, se crearán puestos de trabajo, etc. Creen -y ahí esta su error doloroso- que la situación es como en 1996.
Y las diferencias son abismales: entonces los sindicatos y movimientos sociales eran fuertes y temidos, entonces había moneda nacional, posibilidad de modificar los tipos desde el BdE, se trataba de una crisis puntual española. Ahora estamos al borde del abismo, con un PP reforzado en su discurso más ultraliberal, con unos sindicatos e izquierda cadavéricos.
¿Por que una bomba de relojería social? Porque lo mayoritariamente percibido es antitético con la situación que va a suceder. Y aquí es donde hago mi predicción del futuro. Y es que aunque el PP no haya desvelado su programa.... si lo ha hecho indirectamente. Tras unas semanas leyendo y compilando las citas y declaraciones de dirigentes, unido a las medidas tomadas en otros países, el nivel de la prima de riesgo, los editoriales de diarios y medios de derechas - e incluso Intereconomía, sin haber sufrido úlcera por mi parte... las medidas que en el ciclo de un año puede tomar el posible nuevo Gobierno serán las siguientes:
- Despido o supresión de 300.000 a 500.000 funcionarios en los próximos 24 meses. (Algunos, queriendo tener fe creen que los funcionarios no se pueden "despedir". Pues no es exactamente así. Basta con una excedencia forzosa. Si eso sucediera con un Policia Nacional, cuyo salario es de 1.789 euros brutos en 12 pagas o 1450 euros netos en 14 pagas, el sueldo pasaría a ser de 705 euros BRUTOS en 13 o 12 pagas, quedándose en casa pero cobrando una cantidad menor al desempleo... unos 640 euros)
- Recorte de una de las pagas o ambas para el personal del sector público. Posiblemente la primera medida para cuadrar el presupuesto de 2011.
- Posible reducción de sueldo para el personal del sector público de un 4% a un 15%.
- Capitalización y privatización de la prestación por desempleo progresivamente, pasando por una reducción del tiempo y cuantía (máximo año y medio; reducción de cuantía en un 20-30%).
- Bajada de pensiones, a pesar de las reiteradas promesas electorales. Inicialmente pueden realizar una tímida subida para ganarse a un sector fiel del electorado (p. ej: subida del 0.2% para 2012)
- Privatización de aquellas empresas públicas viables, como puedan ser REE o no viables mediante un sistema mixto, como RTVE.
- Destrucción del sistema público de Asistencia social, aderezado por una campaña de "difamación": hacer ver a la ciudadanía que es un gasto para mantener vagos en lugar de una inversión a largo plazo. La mejor asistencia social es la vara: la represión, la coacción....
- Privatización progresiva del sistema educativo y sanitario: recortes en el dinero destinado a ambas políticas sociales.
- Copago sanitario, tanto en medicamentos como en asistencia sanitaria. Fin de la universalización de la Sanidad.
- Derogación de la Ley de Educación y con ello las ratios. Masificación en aulas públicas lo que facilitará la degradación de la Enseñanza pública.
- Recorte en el presupuesto de becas (ya en 2003 planteaban la supresión de las becas compensatorias)
- Fin de la subvenciones a la enseñanza universitaria. Lo que conlleva el aumento de tasas en un 200%.
- Reforma laboral con contrato de indemnización de crisis (indemnización testimonial e incluso pagada por el Estado)
- Subida impositiva del IVA: tipo general al 21%, reducido al 10% y superreducido al 8%.
- Aumento de la retención en nóminas del IRPF en dos o tres puntos.
- Fin de las subvenciones a partidos políticos, sindicatos, cine. Mantenimiento de dichas subvenciones a la Iglesia.
- Nuevas inyecciones de liquidez a bancos y cajas.
Y la pregunta es ¿que sucederá cuando los mismos que veían en Rajoy a su esperanza, al mirlo blanco, vean en el la peor de sus pesadillas, el fin de su puesto de trabajo, de su prestación, de su derecho a acudir al médico?¿Que sucederá en ese momento?
Pues sucederá que esa ola de aprecio hacia el salvador se convertirá en una auténtica bomba social de consecuencias imprevisibles.
Y es que convendría que los españoles mirasen con detalle los programas electorales y leyeran entre líneas.
PD: Lo mismo pasaría con el PSOE, que nadie se lleve a engaños, solo que con una sonrisa mientras te están recortando.... que a nadie se nos olvida que Rubalcaba era ministro cuando: se privatizó AENA, Loterías; se suprimieron los 426 euros, se bajó el sueldo al sector público, se congelaron pensiones, etc. etc.
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