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27 ago 2012

Carta abierta a un minero huelguista de la empresa UMINSA.


Estimado minero huelguista de UMINSA y subcontratas de la misma empresa.


Te escribo desde muchos kilómetros de distancia, desde la orilla del Mar Mediterráneo. Por suerte para mi, tras la lucha que llevasteis a cabo desde finales de mayo, tu situación, tu tierra, la situación del sector del carbón no es de
sconocida para mí.


Es posible que siendo de fuera, a pesar de toda la gente que he conocido en las cuencas de Asturias y León, a pesar de haber compartido días de Marcha Minera por solidaridad y por convicción, pueda no saber al 100% lo que pasa en la minería... Es posible incluso que en ocasiones me equivoque al opinar sobre ello, porque no soy más que alguien que, desde tierras lejanas, os ha dado apoyo y os ha tenido como referente de la lucha que todos y todas deberíamos imitar, pues como sabes perfectamente, querido amigo, no pasa un día sin que se rían en tu cara y en la mía este Gobierno de mierda y la Patronal.


Quizá lo conoces por publicaciones anteriores. Soy un simple profesor en paro. Uno más de las víctimas de las tijeras del Gobierno. De las mismas tijeras que están machacando al sector de la minería del carbón. Por ello, no puedo dejar de solidarizarme contigo y con tu situación. Máxime tras tener contacto con la minería, de una forma que ni yo mismo hubiera imaginado tres meses antes.


Al escribirte, soy perfectamente consciente de tu situación. Porque sé y me consta la dura situación que estás atravesando, tanto a nivel económico como moral, por los dos meses de huelga anteriores. Porque incluso hay familias mineras que tienen que pedir dinero prestado a amistades o gente que recurre a "despensas solidarias".


El Gobierno recortó y vuelve a recortar al sector en el que trabajas. Sin piedad, prácticamente con la voluntad de exterminar a un sector donde los trabajadores son incómodos. Ahora, que el Gobierno sigue en sus trece, el empresario minero, Alonso, como ya ha hecho la Hullera Vasco Leonesa en forma de despidos, pretende cargar el peso del recorte en las espaldas de los que menos culpa tienen, como siempre pasa.


A pesar de tener todo en contra, no has dudado en luchar, a pesar de las amenazas de despidos, por tus derechos. Has sido capaz de comprender algo que, algunos, a pesar de los años de crisis, no han entendido: que al final quien cede, acaba en la cola del paro tarde o temprano. Se empieza renunciando a los derechos, para acabar renunciando forzadamente al puesto de trabajo cuando ya no queda nada a lo que renunciar. 

Por ello quiero darte mi enhorabuena. Es una muestra de fortaleza y convicción firme sin igual. Aunque sea por una rebaja salarial. Se empieza aceptando una rebaja salarial y se acaba en la cola del paro. Te lo digo yo, que primero rebajaron el presupuesto en Educación, luego se nos rebajó el salario.... nos dijeron que era suficiente para salir de la crisis. Como no íbamos a salir nunca de ella, entonces sobrábamos muchos.... y ahora estamos en el paro. Los que luchamos entonces, muchas veces en minoría, acabamos teniendo tristemente razón cuando el desastre era inevitable. Y muchos, cuando quisieron mover el culo....era tarde. Muy tarde.


Posiblemente estés un poco disgustado porque el seguimiento en tu empresa no haya sido total. Posiblemente también porque el resto de empresas no hayan parado. Para nada lo estés. Quizá necesites explicarlo, amigo minero combativo, pero poco a poco muchos de esos que ahora pueden no estar de acuerdo contigo, acabarán a fuerza de sablazos empresariales o gubernamentales, estando de tu parte. 
 
Es de lógica. Si las ayudas han sido recortadas y la producción también, es cuestión de días o semanas, que los despidos, rebajas salariales, etc estén a la orden del día, no solo en tu empresa, sino en el resto, como ya ha pasado en Hullera Vasco Leonesa, donde un sindicato propuso un referéndum para volver al trabajo (porque algunos argumentaban que era lesivo continuar la huelga para la empresa) y ahora empiezan las cartas de despido sin más motivo que “necesidades de empresa” (aún habiendo repartido un dividendo a los accionistas por valor de casi 2 millones de euros)

Cualquiera con un mínimo de visión entenderá, como tú has sido capaz de entenderlo, que, tarde o temprano, el carácter del mismo funcionamiento del sistema capitalista, hará que el empresario cargue el recorte gubernamental en las espaldas de los trabajadores del sector de la minería. No porque el empresario sea malo malísimo, sino porque es empresario, simple y llanamente.

También te animo a que exijas a esos que representan a los trabajadores, a los sindicatos, contundencia. Contundencia para defender los derechos y los puestos de trabajo, dejándose de laxitudes y de palabrería,  que no conduce ninguna de ellas a nada.

Porque hoy son tus condiciones laborales. Si cedieras, esperando mantener el puesto de trabajo, volverán a imponerte nuevos ajustes laborales, vía sueldo o vía derechos laborales…. Cuando hayas cedido pensando que ya es “la última vuelta de tuerca”, llegará la siguiente, seguramente en forma de carta de despido o Expediente de Regulación de Empleo.

Si te digo eso, no es porque sea adivino ni porque tenga una bola de cristal, te lo digo porque en el sector en el que yo trabajaba, el educativo…. Se cedió, salvo una minoría…. Se volvió a ceder, salvo una minoría más numerosa. De la misma forma que en tu sector algunos buscan hacer diferente a los mineros de interior con los de cielo abierto y a todos ellos de los que trabajan en subcontratas, cuando todos son lo mismo (trabajadores mineros); en el mio pasó entre profesores funcionarios y profesores interinos… Y acabaron yendo a por los más débiles… Ahora, te escribo esto tras haber visto como muchos compañeros creyeron que sería solo una bajada de sueldo o una pérdida de derechos… y ahora estamos todos en el paro aquí en Valencia. Sin nuestro puestos de trabajo.

Exactamente lo mismo que están haciendo en tu sector: Como no pueden ir a por todos a la vez, porque la respuesta sería dura y ejemplar por vuestra parte, primero van a por las subcontratas… después a por los del cielo abierto, después quitan derechos laborales…. Y, finalmente, ya sabes que viene después.

Por ello, te animo a que sigas luchando, a que trates de abrir los ojos a esos compañeros que piensan que ahora hay que “apretarse el cinturón”, a esos que tienen miedo al despido… A esos que aun piensa que a su empresa o a su categoría no les afectará.  Y te animo, y siento ser repetitivo,  porque yo ya viví algo parecido y la mayoría prefirió ceder: Ahora el precio a pagar es el más lesivo y más sangrante: la cola del desempleo.

Espero que tengas el tesón, junto al resto de tus compañeros, amigos y familiares, para plantear batalla y convencer a los que dudan… Espero que seas capaz de vez la magnitud del problema y evitar la desmoralización, que te llegará de muchos sitios interesados. Porque yo conozco a gente que ha luchado y ha perdido, pero también a gente que ha ganado. Lo que no he conocido nunca es a nadie que habiendo aceptado tragar una vez hayan dejado de volver a ningunearle en el futuro.

Que sepas que eres un ejemplo para muchos, y aunque las barricadas no se hacen con letras, valga este escrito como forma de darte el poquito respaldo que desde la lejanía te puedo dar. No te rindas, no te vengas abajo… Tarde o temprano, tus compañeros abrirán, a fuerza de golpes, los ojos. Solo espero que entonces no sea demasiado tarde.

Con aprecio de alguien que se siente compañero tuyo de lucha. Un fuerte abrazo y fuerza.

¡Que viva la lucha de la minería! ¡Que viva la lucha de la clase obrera!

Julián Jiménez.

20 may 2012

Dos días de lucha en Educación y muchas lecciones aprendidas.

Como muchos sabrán, porque aún hay despistados que no lo saben, la Educación Pública en la Comunidad Valenciana está en peligro de muerte. Tanto por las medidas que se tomaron en enero como las legisladas por el Ministerio de Educación.

Recorte en los complementos que tenían los docentes, aumento de horas lectivas dentro de la jornada que tenemos los docentes de 37 horas y media y el despido en junio de 8,453 trabajadores de la enseñanza, de los cuales solo regresarán alrededor de 1,500 - 2,000 en septiembre.

Eso por lo que respecta a las condiciones laborales del profesorado. Parte de esos recortes tendrán un impacto en la Enseñanza pública notable, a lo que se añade el aumento de ratio: hasta 43 alumnos en Bachillerato, hasta 38 en Secundaria. Cualquiera con recuerdos añejos dirá que no es para tanto, pero ¿que queremos? ¿volver a la escuela de finales de los 70? ¿Volver a tasas de fracaso escolar del doble que ahora porque entonces se dejaba de estudiar con 12 años?¿Escuelas sin aseos?¿Cayéndose a trozos?

Se suprimen becas y se suprimen refuerzos, desdobles y medios para la atención. En fin, un completo desastre mientras todo ese recorte de recursos no afecta a la escuela concertada. Puede haber gente que piense que solo debería defender mis derechos laborales. Pero cuando uno trabaja para la Educación Pública, consciente de lo que es y significa, todo esta interconectado. Si la Escuela Pública se hunde, los docentes nos estamos hundiendo con ella. Y dice el refrán sabio castellano "cuando se quiere matar al perro, nada mejor que culpar a la rabia". Nada mejor que destrozar la Escuela Pública para justificar su posterior privatización.

Por todas estas razones, los trabajadores del sector educativo público valenciano, estabamos llamados a secundar una huelga de 48 horas, huelga acordada en asambleas y convocada por los sindicatos. En todo momento, mi persona, aportando su granito de arena, ha tratado de ser activo en la medida de lo posible en las protestas (si quieres, Consellera, te lo apuntas tu o tus chivatos a sueldo, para la lista) porque siempre, de acuerdo a mi conciencia, lo he hecho. De la misma forma que lo hacía cuando me he ido a parar un desahucio de una familia o cuando fui a la huelga por las reformas laborales del PSOE y del PP. ¿Cómo no iba a defender mi puesto de trabajo con el instrumento más poderoso que tiene cualquier trabajador?

Y la verdad, es que estoy orgulloso de muchísimas personas que han estado conmigo estos días. Y mi valoración es positiva. Muy positiva. No tengo nada de optimista, basta con leer las previsiones económicas de mi blog para hacerse una idea. Pero a pesar de la enorme cantidad de "compañeros entre comillas" que tenemos en la profesión docente, un 40% de seguimiento ahora que se tienen datos totales, es un buen resultado. Y lo es por muchas razones:

1º La sanidad por ejemplo ha sufrido recortes similares o peores y tan siquiera, por razones que ellos tendrán que explicar, han sido capaces de plantear un solo paro. Mientras el peso de las protestas en el País Valenciano lo estamos llevando los docentes casi de forma exclusiva.

2º Vivimos en el mundo que vivimos: en una sociedad donde han triunfado las ideas dominantes y muchos, por muy docentes y muy eruditos que puedan pensarse que son, han sido alienados por ellas. Escuchar de una iletrada docente en Historia que una "huelga nunca ha servido para nada" es un claro ejemplo de ello. El individualismo atroz en el que nos han instalado existe y no lo vamos a cambiar en dos días, además, nosotros no tenemos ni prensa, ni radio ni televisión. Ni miles de millones para difundir la idea como las escuelas de negocios.

3º La ausencia de conciencia de clase. Puede parecer una tonteria. Cuando digo "trabajador de la Escuela Pública" en vez de "funcionario docente" no lo hago por casualidad. Muchos docentes han asimilado, como otras personas, que forman parte de una clase media, incluso algunos que están por encima del resto de trabajadores, cuando eso no es así. Un simple cambio puede ponerte en la calle como a los interinos (que se lean los periódicos griegos o portugueses y el EBEP si tanto saben).

"Uy, yo no voy a hacer huelga como los obreros" comentó cierta docente, ignorando su grado de estupidez cuando en unos meses puede acabar en la calle de una patada en el culo. Quizá por no ser "obreros" estamos como estamos. Todos los recortes y destrucción de nuestros derechos laborales no hay gobierno que tenga cojones a hacerlo a los obreros de astilleros sin que le ardan las calles. Porque claro, allí saben que la unión hace la fuerza y van todos a una. Y en vez de montar batucadas, montan barricadas.... a nosotros aún nos queda.

4º Técnicas de manipulación.

Un día antes de la huelga, en dos diarios salió una información de desconvocatoria de días de huelga falsa. Para sembrar confusión.

Al día siguiente, la misma consellera falseó los datos de la huelga para rectificar al día después. ¿Casualidad? No, desmoralización. Que unida a la labor de desmoralización de personas (que posiblemente esten retribuidas por ello) en foros de trabajadores de enseñanza, hizo que el número de huelguistas descendiese el segundo día.

Con todo ello, ver la cantidad de personas que, estando en huelga, llenaron las calles de Valencia el miercoles y de las tres capitales valencianas el jueves, es un EXITO. Un éxito porque teníamos todo en contra, y ver una manifestación de huelgustas con 20.000-25.000 personas es una muestra del éxito de convocatoria.

A mi, que participé tanto en la manifestación de Valencia como en la del día siguiente en Alicante, me sirvió para mucho. Me sirvió para comprobar la enorme implicación y generosidad de muchos trabajadores de la Enseñanza pública valenciana para con su trabajo y con su dignidad profesional y laboral. A un mes de ser despedido, y sin saber si volveré a formar parte del colectivo de docentes y enseñantes, es verdaderamente satisfactorio ver la enorme cantidad de COMPAÑEROS, a los que se puede aplicar con orgullo dicho término.

Todos aquellos y aquellas que, no solo sacrificaron su salario, sino que estuvieron presentes en la manifestación de Valencia. O en la de Alicante el día siguiente, donde no tuvimos reparo en entrar en la Consellería a dar la lata o tratar de hacerlo en Canal 9. Por lo mismo que nosotros.... los griegos asaltaron la televisión en directo, asi que lo nuestro fue demasiado light y festivo. Sea como fuere, fue un orgullo conocer a muchos compañeros a los que solo conocía de haberlos leido y a otros que no conocía pero que al parecer si me conocían a mi por haber estado "dando caña" en asambleas, foros y blogs.



Como también fue un placer estar con compañeros de mi centro, enormemente luchadores, que aún siendo una minoría, se hacen de notar. Ernest, Carmen O, Rosa, Alberto, Ricardo, Nerea, Empar, Mila, Mercè y Carme. (seguro que me dejo a más gente, perdón) Gente que en muchos casos tienen menos motivos para luchar que otros que deberían hacerlo y no lo hacen, y sin embargo están ahi, defendiendo de una forma noble, decente y sin dar paso atrás nuestros derechos, la Escuela Pública y nuestra dignidad como trabajadores.

Desgraciadamente hay otros "compañeros". Esos a la que la Consellera Català  daba las gracias "por trabajar un día de huelga" (o por vender su dignidad por unos euros tirados a la cara, que es como lo veo yo). Esos que ahora se lamentarán de la última medida de Consellería: la posibilidad de desplazar por toda la Comunidad a un docente que pierda una plaza suprimida e incluso forzarle a dar otras materias o reducirle un 20% el sueldo si no puede dar las suficientes horas lectivas (por falta de plazas).

Sería un justo castigo divino, si no fuera porque también a quienes defendimos nuestos derechos nos será aplicada la norma. Quizá tengamos que dar gracias a esos esquiroles por su arrastrada actitud. De eso y de todo lo que venga a partir de ahora, aunque puede que algunos con esas medidas nuevas lleguen a reconsiderar si merece la pena perder un dia de salario o defender los derechos que te están quitando.

En mi centro tengo muchos especímenes de esquiroles orgullosos de serlo, a cual más pintoresco. Los desprecio profundamente y ellos me desprecian a mi. Desde la "antiprofesial" docente que ladra cuando tu no estás, hasta delante de niños de 12 años, pero que no tiene la valentía de decirtelo en la cara, pasando por el que se cree que lo sabe todo, que sus 20 trienios hacen que el sea persona y tu no (y que merezca poco más que la canonización). Luego "funcionarios" que alaban las virtudes de la escuela privada, fachas hasta decir basta, pero que no tienen ningún problema en cobrar de la pública mientras "se la suda" si el centro se cae a trozos o no. "Ande yo caliente..."

Luego hay casos aun más peculiares: el progre-retro que hace todo tipo de progreces pero que ha asumido el discurso de "una huelga no sirve para nada, solo sirve votar"; interinos que se ven intocables aunque se van a la calle y no se mueven. O aquella o aquel que no necesita hacer huelgas porque, total, su sueldo de docente solo es un complemento del sueldo de su pareja.

En fin, las anécdotas podrían ser peculiares, pero prima el desclasamiento, el creerse "estirpe", el individualismo más recalcitrante o el fanatismo pepero, conservador, derechista o vete tu a saber (si, ya se que es ridiculo, pero hay profesores de la pública de derechas como también habría algún judío que, posiblemente, votó a Hitler en el 33). Muchos padres y madres, sin trabajar dentro, hacen una labor en defensa de la escuela pública más importante que muchos de esos docentes, es triste, pero es así.

Poco más tengo que añadir a la parrafada. Simplemente dar las gracias a todas esas personas, esos compañeros decentes y docentes, que han sabido luchar por lo suyo.

Que no decaiga esa moral, que nadie os haga agachar la cabeza, porque vosotros y vosotras la podéis llevar bien alta. Otros son los que tienen que sentir vergüenza, no vosotros. Y el tiempo, que es lo más justo que existe, acabará poniendo a cada cual en el sitio que corresponde.

Un fuerte abrazo de un compañero vuestro que, aunque sea despedido, seguirá siendo COMPAÑERO, hoy, mañana y cuando haga falta.

20 abr 2012

Reflexiones de un profesor cabreado.


En la vida, muchas veces nos habrá pasado, sentir rabia por ser el pepito grillo que adivinaba lo que iba a venir y no tener la suficiente capacidad para hacérselo ver a los demás. Eso es lo que siento y comparto con todos vosotros y vosotras desde estas líneas, mientras me tomo un amargo y agrio café como siempre cuando uso esta bitácora para reflejar mi pensamiento sobre la situación que me rodea.

Corría el mes de febrero y entonces, ante el Decreto de Recortes promulgado por la Generalitat, era de las pocas voces que demandaba acciones contundentes. La petición de una huelga indefinida o semiindefinida, no solo para parar el Decreto ya aprobado en enero, sino para parar la ola de recortes que vendría una vez pasadas las elecciones andaluzas.

En aquella carta, muy difundida en el sector docente y en aquellos que conocen que defender la educación es no solo defender a los trabajadores del sector, sino a sus hijos y la igualdad social. Muchos fueron quienes me felicitaron y quienes asumieron mis tesis como acertadas. No obstante, aún seguíamos siendo un sector minoritario. 

Ahora no hace falta valorar el escrito. El tiempo me ha acabado dando, muy a mi pesar, la razón sobre lo que yo sostenía. No solo en lo que concernía al mantenimiento de los recortes y a la debilidad de la movilización dentro del sector docente debido a la falta de contacto con la realidad o el aburguesamiento de muchos “profes”. Sino en lo concerniente a las posibles medidas de ajuste draconiano al estilo griego que iban a venir y que ya están aquí.

Con las medidas que se aprobarán mañana en el Consejo de Ministros, la ratio aumentará a 40 alumnos en Secundaria  y 30-33 en primaria. Además, las horas mínimas de clase docente (recordemos que no es lo mismo horas de clase que horas de trabajo lectivo) serán 20, sin especificar cuáles serán las máximas. Lo que deja la puerta abierta a muchas más de las que prevén los sindicatos docentes. 

Todas estas medidas tienen un resultado irrefutable: El despido inmediato de 90.000 a 100.000 personas en toda España dentro de la Enseñanza Pública. Pero, casualmente, los números no salen, dado que la cifra a día de hoy de docentes interinos (de 2011) era de 70.867. Ello solo puede significar que habrá 30.000 (que pueden ser más en tanto que cada comunidad puede adoptar medidas más duras) funcionarios docentes que se verán de alguna manera semidespedidos (cobrando sueldo base, es decir, cobrando una media de 781,23 a 878,12 euros al mes netos dependiendo de la CC.AA en la que se encuentren) o directamente despedidos en caso de que el Gobierno decida aprobar alguna ley que lo permita.

Ante este negro panorama, aún hay elementos dentro de la docencia que se muestran totalmente tranquilos y ajenos a la protesta, bien por ser directamente mamporreros oficiales del partido en el gobierno, bien por una mentalidad burguesa, creyéndose intocables, o directamente tontos útiles que existen hasta en las mejores casas.

En el caso de País Valenciano es también ampliamente criticable el papel de los sindicatos, quedando totalmente atrasados, debido a que su “culmen” movilizador es un Referéndum contra el Decreto de Enero. ¿Cómo? Como lo comentamos. Mientras el Gobierno pone la 5 marcha, los sindicatos aún están con el Decreto de enero que prácticamente es un juego de niñas en un patio de colegio ante el “Superdecreto Wert”.

Ante esto, la única arma debe ser una huelga prolongada en la enseñanza, movilizada, activa y combativa. Y para ello es necesario que los sindicatos se dejen ya de tonterías, de mamandurrias, de vaguedades y de peticiones de pacto. ¿Qué pacto? ¿Pero no sois conscientes aun que la hora del pacto ha muerto? ¿Aún pretendéis trabajar como si estuvierais en 2007? El único camino contra esos recortes es la lucha, prolongada en el tiempo, y el papel de los sindicatos, clave. Si los sindicatos juegan a ser unos apagafuegos de Consellería, lo único que van a conseguir es firmar su propia sentencia de muerte.  ¡Que estamos en 2012! ¡Que a quienes tenéis enfrente van a por todas sin titubeos ni medias tintas! Esto es ya una lucha sin cuartel, a muerte, por defender el último muro que queda por derribar después del tsunami capitalista que asola el Estado Español. 

Si los sindicatos actuales del sector de la Enseñanza (fundamentalmente UGT, CCOO e Intersindical) priorizan el llegar a acuerdos con los sindicatos corporativos frente a ponerse al frente de una movilización que implique huelgas, serán ellos mismos quienes se dispararán un tiro en el pie. Porque no pasará mucho tiempo para que, sindicatos más combativos, más acercados al clima social que se pudre a marchas forzadas, ocupen el lugar que dejan los oportunistas. Y quien escribe esto es un afiliado a Comisiones Obreras que reclama, abiertamente, a su sindicato, dejarse de medias tintas.

El único camino es una huelga que comience a mediados de mayo, que paralice, en concordancia con asociaciones de alumnos y aquellos padres que quieran sumarse, el sector. Porque ya no hablamos de sueldos, ¡no nos vengan con la milonga de la defensa de los sueldos! Lo que estamos defendiendo son 100.000 puestos de trabajo que, al perderse, hundirán a la Enseñanza Pública en un gueto para aquellos que no pueden costearse la Escuela Privada o Concertada. 

Los padres tendrán que entender que es también por su bien porque lo que sufrirán de llevarse a cabo estas medidas será más o menos a una huelga perpetua en la enseñanza pública. El fin de lo que hoy conocemos como Escuela Pública y, por ende, el fin de esa escuela nacida en los años 30 que tenía como objetivo la consecución de la igualdad social. 

Y a los profesores que aún no tengan motivos para movilizarse, tendrán irremediablemente que elegir en que bando están. Ya no valen las medias tintas, ni la ambigüedad ni la prudencia. Ya no sirve  eso porque toda muestra de flaqueza o todo componente que no suma, resta. Y suma a favor de nuestros enemigos, de esos que teniendo el poder nos quieren poner de patitas en la calle a 100.000 personas, 16.000 en la Comunidad Valenciana. 

Podemos ganar y podemos perder. Claro está. Podemos ver que no se cumplen ningunas de las reivindicaciones, podría ser. Pero lo que queda claro es que desmovilizados nadie va a venir a resolver el problema. Ni nos van a devolver graciosamente los derechos que nos han quitado. Eso solo lo pueden creer ilusos o personas que engañan a los demás o se engañan a si mismas.

Quizá el peor cáncer que pueda tener el sector docente para una posible movilización son todos aquellos aburguesados que han creído y se han creído intocables, que esto no van con ellos, que ellos acabarán jubilándose. Esos son los mismos que jamás creyeron que les bajarían el sueldo ni les pondrían a trabajar. Es la mentalidad del que cree que es lo que realmente no es. Un teórico intocable. Pero los hechos borran de un plumazo las ilusiones de los mediocres. A cualquiera le queda claro que los únicos intocables son los que mandan y los banqueros, mientras lo permitamos.  Y que un docente de la escuela pública no es sino un estorbo para ellos y sus planes.

La realidad es tozuda y dolorosa, pero solo existe una realidad.